El crecimiento de un negocio o empresa familiar trae consigo la necesidad de evolucionar para operar de forma eficiente.
Profesionalizar un negocio implica reorganizar el modelo basado en criterios económicos y empresariales que soporten cada toma de decisión que le permitan madurar y mantenerse en el tiempo.
Muchos de los emprendimientos presentan más debilidades (internas) que amenazas (externas).
La mayoría de los conflictos empresariales pueden ser anticipados o evitados.¿Pistas de que tu negocio requiere profesionalización?
Aumento de quejas de parte de los clientes/empleados
Reducción de ventas / rentabilidad
Des-coordinación en uno o parte de los procesos (entrega, cobranza, etc)
Recursos sin aprovechar al 100%
No puedes solo con toda la carga de trabajo
Ideas que nunca se materializan
¡Comienza a cambiar esta realidad!
Recibir acompañamiento o asesoría de profesionales que ayuden a estructurar o administrar los nuevos desafíos: No requieres de grandes gurús, con una metodología comprobada y práctica podrás encontrar soluciones a medida.
Contratar personal capacitado o idóneos para cada una de las labores: Contratar referidos o por intuición simplemente no siempre te conducirá al mejor camino.
Definir políticas y procedimientos formales: Si aún no sabes cómo deberían hacerse las cosas (paso a paso) ¿cómo alguien más podrá colaborarte con efectividad?
Establecer la declaración de principios organizacionales (misión, visión, objetivos): Más que tener olfato a las circunstancias, hay que crear escenarios que acompañen la idea.
Nivelar las prioridades comerciales con el desarrollo del negocio: La venta es importante pero es igual de importante establecer bases sólidas si queres que tu negocio permanezca en el tiempo.
Brindamos acompañamiento especializado para precisar los problemas de la empresa, analizamos diferentes opciones para resolverlos. CONSULTA SIN CARGO
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